«El león que llevamos dentro» por Raquel Pedrouso

By 18/08/2013Blog, Uncategorized

En estos días de verano donde se comparte más las calles, las conversaciones, donde nos ponemos al día con los amigos que están fuera, comentamos los éxitos y fracasos, situación social, política y sobre todo moral por la que está pasando el país, es frecuente encontrar a personas con una alta capacidad de resiliencia y otras que no son capaces de ver ni un poquito el vaso medio lleno.

La sensación y la evidencia de que la respuesta está en nuestro interior, que nuestro modo de ver el mundo es lo que nos condiciona a la hora de tomar nuevas vías y caminos, de cambiar el papel de observador a pasar a ser un expedicionario de los nuevos tiempos.

La Resiliencia etimológicamente es “saltar hacia atrás, rebotar”, hemos dado un paso atrás y ahora toca rebotar ¿Cómo?

Primeramente, haciendo uso de la inteligencia emocional en el aspecto de AUTONOCIMIENTO. Cuando nos Reconocemos sabemos lo que nos gusta, en lo que somos buenos, en lo que no, dónde podemos aportar, cuáles son nuestras fortalezas, cómo podemos emplearlas en la búsqueda de empleo o generar nuevas oportunidades. Emplear las fortalezas para el día a día hace que construyas desde un terreno más firme más evidente y que seguramente te dará unos resultados más acordes con tus valores y objetivos personales y profesionales. El AUTOCONOCIMIENTO amplía nuestro límites, los transforma, los modifica, los regenera, eleva el nivel de conciencia y desarrolla la confianza en nosotros mismos.

ACCIÓN, de poco vale el pensamiento sin acción, la acción es la que cambia el modo de ver y hacer, si no haces nada cambiará. Elabora un plan de acción para la consecución del objetivo que te plantees, marca los tiempos, analiza las piedras del camino, busca soluciones anticipadas para las posibles tempestades en la travesía que te encontrarás, plantéate varios caminos para llegar al objetivo, empleando además del plan A, el B, el C y el C prima. Sobre todo responsabilízate de tus actos de una forma consciente y celebra los éxitos que consigas.

COMPARTIR, con los demás tus inquietudes, tus ideas, tus acciones planeadas, escuchar a los demás de un modo atento, con la vista y el oído del que ve y escucha por primera vez, dejando atrás el juicio, los pensamientos desiguales como fuente de conflicto. Mira al mundo con las gafas del aprendizaje experimental, haz para experimentar, escucha para hacer y compartir, porque el camino en compañía hace un mejor camino. Trabaja la empatía como herramienta de crecimiento, tu campo de visión se ampliará en infinitas posibilidades.

“No vemos el mundo como es, sino tal como somos nosotros” (Steven Covey)

¿Te atreves a vivir en Resiliencia? ¿Cuáles son tus fortalezas? ¿ te atreves a diseñar tu plan de acción? ¿Qué harás para vencer el miedo? ¿Cuál es tu marco de posibilidades? ¿Para qué estas aquí? ¿Qué te inspira este post? ¿COMENZAMOS?

Un abrazo afectuoso, Raquel.